viernes, 7 de febrero de 2020

TERESA DE JESÚS: REGALOS DE UNA VIDA NUEVA


"Quiero ahora tornar a donde dejé de mi vida... Es otro libro nuevo de aquí adelante, digo otra vida nueva. La de hasta aquí era mía. La que he vivido desde que comencé a declarar estas cosas de oración, es que vivía Dios en mí, a lo que me parecía..." (23,1).


En nuestros encuentros para leer a Teresa de Jesús, y luego de haber hecho una introducción general al LIBRO DE LA VIDA, comenzamos a leer la tercera parte de este libro, es decir los capítulos del 23 al 31. Aquí Teresa reanuda el relato interrumpido en el capítulo 10, y lo traslada a otro plano, pasando de la lucha ascética a una etapa realmente nueva, la vida mística, que ella va a descubrir y que busca entender y aprovechar. Son estos fenómenos los que acabarán motivando la composición del libro que seguimos.

Este es el ESQUEMA GENERAL de esta parte del libro:

Cap.23: Teresa recibe la primera efusión de gracias místicas; crisis de temor, y la oposición que encuentra en confesores.
Cap.24: Primer arrobamiento y primera locución interior.
Cap.25: Cómo son las palabras interiores y los criterios de discernimiento. 
Cap.26: Índice de libros prohibidos: "Yo te daré libro vivo".
Cap.27: Primera visión "intelectual" de Jesucristo.
Cap.28: Múltiples visiones "imaginarias" de Cristo en su Humanidad. 
Cap.29: Crecida del amor. Ímpetus. Crece la oposición. Gracia del dardo (Transverberación). 
Cap.30: Seguridad de Fray Pedro de Alcántara. Rachas de noche oscura.
Cap.31: Se intensifica su noche oscura

En el capítulo 10 de este libro, VIDA, Teresa escribe: 

"Tenía yo algunas veces, aunque con mucha brevedad pasaba, comienzo de lo que ahora diré: acaecíame...algunas veces leyendo, venirme a deshora un sentimiento de la presencia de Dios que en ningunas manera podía dudar..." (10,1).

Ahora, comenzando el capítulo 23, donde retoma el relato, escribe: 

"Comenzando yo a quitar oraciones y a darme más a la oración, comenzó el Señor a hacerme las mercedes... Comenzó Su Majestad a darme muy ordinario oración de quietud, y muchas veces de unión que duraba mucho rato... Muchas veces sin poderlo excusar... con grandísima seguridad de que era Dios".

Quiere decir que de tener experiencias místicas esporádicas y muy breves, Teresa va pasando a los estados místicos que le acaecen "muchas veces, mucho rato, muy ordinario".  Para ella esto constituye una novedad sorprendente y alarmante, incluso a veces habla de miedos. Por ello recurre a personas que le ayuden a comprender estas nuevas realidades que experimenta en su oración, y escribe varias veces acerca de lo que vive para que sus confesores o consejeros le den opinión, positiva o negativa. 

Este es el esquema básico del capítulo:
#s 1-5: gracias y temores, y búsqueda de consejeros.
#s 6-14: El problema en manos de Salcedo y Daza. Consultas (8-11) y sentencia adversa (12-14). 
#s 14-18: Pausa de calma bajo la dirección del P. Cetina.

La novedad de estas experiencias produce en Teresa sorpresa y un cierto sentimiento de humillación al hacerse más consciente de su pobreza e indignidad ante los regalos o "mercedes" que recibe, pero luego también empieza a sentir temor, miedo dice ella, porque sabía de casos y realidades de su tiempo. Entonces empieza a buscar personas espirituales con las que aconsejarse y tratar.

Tres asesores: Francisco de Salcedo, "el caballero santo" , que era laico, seglar: Gaspar Daza, sacerdote ejemplar muy conocido en la ciudad por su labor pastoral y social; Diego de Cetina, joven sacerdote jesuita, recién llegado a la ciudad. Fue este último el que la sacó de dudas, y le dijo que lo que sentía era de Dios. Los otros dos asesores tardarán más en rendirse a la evidencia.

Pasemos ahora al capítulo 24, de signo altamente positivo, que completa el anterior, y habla de aprovechamiento y de regalos recibidos de Dios. Gravita todo en torno a la primera gracia de arrobamiento que recibe Teresa y que la libera definitivamente de apegos y dependencias afectivas. 

Los episodios narrados se suceden del siguiente modo:

1. Como punto de partida, ha sido determinante la confesión de Teresa con Diego de Cetina y las orientaciones que recibe de este (1).
2. Siguen dos meses de resistencia por parte de Teresa a los impulsos interiores, siguiente las indicaciones de su confesor (1-2).

3. Entonces llega a la ciudad de Ávila el P. Francisco de Borja, comisario jesuita. Teresa le expone su situación y el sentencia que es "espíritu de Dios" y que no debe ponerle resistencia. Teresa queda muy consolada.

4. Cuando se marcha el P. Cetina, Teresa adopta por confesor a otro jesuita, el P. Juan de Prádanos; es 1555 (4), y bajo la dirección de este le sobreviene el primer "arrobamiento", que le espanta mucho. (5). 

5. A partir de esta gracia, comienza vida nueva en la afectividad y relaciones sociales de Teresa (5-8). 

 En el #4 habla Teresa de Doña Giomar de Ulloa, señora joven y viuda, que le apoyó y acompañó en su aventura fundacional. 

"Sea Dios bendito por siempre, que en un punto me dio la libertad que yo, con todas cuantas diligencias había hecho muchos años, no pude alcanzar conmigo, haciendo hartas veces tan gran fuerza, que me costaba harto mi salud. Como fue hecho de quien es poderoso y Señor verdadero de todo, ninguna pena me dio" (8).

Fr: Manuel de Jesús, ocd


FRANCISCO HABLA DE TERESA

“En la escuela de la santa andariega aprendemos a ser peregrinos. La imagen del camino puede sintetizar muy bien la lección de su vida ...