martes, 4 de marzo de 2014

PARA LEER A SANTA TERESA... VIDA 7


Ahora llegamos a los tres capítulos más importantes de la primera parte del LIBRO DE LA VIDA; los que presentan de modo magistral la transformación interior que tiene lugar en Teresa. Los capítulos 7, 8 y 9 se convierten para nosotros, los lectores, en hoja de ruta para leer nuestro propio camino interior, nuestra búsqueda, nuestra transformación en Cristo. Podemos leer el título de los capítulos para tomarnos una primera impresión:

Capítulo 7: Trata por los términos que fue perdiendo las mercedes que el Señor le había hecho, y cuán perdida vida comenzó a tener. -. Dice los daños que hay en no ser muy encerrados los monasterios de monjas.

Capítulo 8: Trata del gran bien que le hizo no se apartar del todo de la oración para no perder el alma, y cuán excelente remedio es para ganar lo perdido. - Persuade a que todos la tengan.- Dice cómo es tan gran ganancia y que, aunque la tornen a dejar, es gran bien usar algún tiempo de tan gran bien.

Capítulo 9: Trata por qué términos comenzó el Señor a despertar su alma y darla luz en tan grandes tinieblas y a fortalecer sus virtudes para no ofenderle.

 Nos centramos para empezar en el capítulo 7: Años difíciles para Teresa, años de crisis y de luchas, también la muerte de su padre hace mella en ella, pero despierta a la vez también una lenta recuperación espiritual. Casi un decenio, entre los 35 y los 45 años de edad, recogen estas páginas.

1. Teresa, enferma de cuerpo, pasa a serlo también de alma. Es víctima de 2 tentaciones: siente vergüenza de sí misma ante Dios (dejar la oración), y se siente impulsada a ser como las otras (mediocridad).
2. Pesa sobre ella la situación de la comunidad (2-5). Cede a las amistades con los de fuera (6-7) y no se rinde al requerimiento misterioso de los dos episodios simbólicos: Cristo (6) y el sapo (8).
3. Una excepción luminosa es la figura de su padre, pero ella no es fiel en el camino que comparten, el de la oración, y termina abandonándola (10-13).
4. La muerte de Don Alonso la sacude interiormente, sumergiéndola en una profunda soledad (13-16), que lentamente le hace reanudar su vida interior, su camino espiritual. Teresa lucha muchos años, y lucha sola.

Así, pues, resumiendo lo anterior, tres recuerdos fuertes dominan el relato de este capítulo 7:  su propia crisis, la figura de su padre,  y la lucha en soledad. Como cierre, un elogio de la amistad espiritual, y una oración de gratitud a Dios.

"Gran mal es un alma sola entre tantos peligros. Paréceme a mí
que si yo tuviera con quién tratar todo esto, que me ayudara a no
tornar a caer, siquiera por vergüenza, ya que no la tenía de Dios.
Por eso, aconsejaría yo a los que tienen oración, en especial al
principio, procuren amistad y trato con otras personas que traten de lo mismo. Es cosa importantísima, aunque no sea sino ayudarse
unos a otros con sus oraciones...".

FRANCISCO HABLA DE TERESA

“En la escuela de la santa andariega aprendemos a ser peregrinos. La imagen del camino puede sintetizar muy bien la lección de su vida ...