sábado, 28 de diciembre de 2013

EPISTOLARIO DE SANTA TERESA

El EPISTOLARIO teresiano constituye casi la mitad de la obra escrita de Santa Teresa, y eso que sólo se ha conservado de él una mínima parte. Se conservan 450 cartas,  más fragmentos de otras. Su contenido es amplio e inabarcable; los más constantes son: problemas de su obra fundacional, cartas familiares, atenciones para el cuerpo. Los autógrafos de las cartas están muy dispersos, y su estructura es la propia de su tiempo. El Epistolario constituye el mejor reflejo de lo que fue la actividad cotidiana de su autora, el vehículo más espontáneo de sus pensamientos y actitudes, para conocer sus desafíos y relaciones sociales.
Enormemente valioso para la comprensión de un autor y su época, el epistolario teresiano ayuda a a sacar a Teresa de una imagen unilateral (mística), y la reinsertan y encuadran en lo humano y femenino, en el realismo de lo cotidiano. Entre las cartas de Teresa destacan las que escribió a familiares, al P.Gracian, y a sus monjas.

Los años de mayor frecuencia epistolar sobrevienen a partir de las fundaciones andaluzas (Beas y Sevilla) y del encuentro con Jerónimo Gracian. Una elemental estadística de las misivas aun conservadas arroja las cifras más altas de los últimos años:

Año 1576... 71 cartas
Año 1577... 53 cartas
Año 1578... 58 cartas
Año 1581... 64 cartas
Año 1582... 40 cartas

Las cartas de la Santa, a diferencia de sus libros, no tienen una expresa intención doctrinal; sin embargo, en el campo de la gesta cotidiana, las cartas contienen muchos más datos históricos que las restantes obras de Teresa.

FRANCISCO HABLA DE TERESA

“En la escuela de la santa andariega aprendemos a ser peregrinos. La imagen del camino puede sintetizar muy bien la lección de su vida ...