SACAR AGUA DE UN POZO.
Pongamos atención a esta frase, y sus tres palabras : POZO, AGUA, y SACAR. La primera nos hace pensar en un lugar profundo, oscuro, dentro del cual encontramos el segundo elemento, el agua. El agua es imprescindible para la vida, hace vivir y crecer, limpia y calma la sed. Nosotros queremos beber del agua de la Vida, y estamos delante del pozo, procurarnos hacernos del agua que hay en él. El pozo es Dios, que está en nuestro yo más profundo, más oscuro también, es decir, en nuestra interioridad. ¿Cómo podemos alcanzarlo? Para empezar, digamos con la mujer samaritana del Evangelio de Juan: "¡Señor, danos de esa agua!". Aquí aparece entonces la tercera palabra, no nos hemos olvidado de ella: SACAR. Si bien sabemos que todo es don de Dios, es necesario que queramos recibirlo nosotros, y que además nos dispongamos a ello. Como suele decirse en teología: todo es DON y TAREA.
Teresa de Jesús es maestra en este propósito, en esta búsqueda, en este desafío. Queremos pasar de vivir en una exterioridad superficial, que esclaviza, a una interioridad honda, que nos permite espacios crecientes de libertad y maduración.
Tomas Merton apunta en uno de sus libros: "El descubrimiento de la presencia de Dios en lo más íntimo de nuestro ser, es en realidad el cambio de una vida exterior a una vida interior en el sentido estricto de la palabra. En general el término vida interior se acepta normalmente como una descripción válida para cualquier clase de esfuerzo realizado después de la oración y la autodisciplina, junto con una cierta cantidad de lectura, meditación y énfasis en la virtud. Hablando con propiedad, la vida interior es una vida en la que se ha despertado esta conciencia interior y espiritual, y hasta que el despertar no tenga lugar, el hombre interior permanece muerto o al menos dormido".
Sería provechoso y enriquecedor acompañar a TERESA en este proceso o camino de interioridad, aprovechando que ella nos dejó escritas sus experiencias en el LIBRO DE LA VIDA, y en otros libros. ¿Cómo Teresa descubrió el camino de la interioridad? ¿Qué hizo para encontrar el AGUA DE LA VIDA en lo más hondo de DIOS, y cómo aprendió a sacarla? Y luego, ¿Cómo puedo aprovecharme yo su experiencia para encontrar también y beber yo del agua de la vida?
Ya veremos como Teresa nos hace descubrir que ese pozo hondo y oscuro es en realidad un precioso castillo, pero adentrarnos en él exige confianza, perseverancia y disciplina.Exige caminar, que no por gusto llamaban a los primeros cristianos "la gente del Camino".
Ya veremos como Teresa nos hace descubrir que ese pozo hondo y oscuro es en realidad un precioso castillo, pero adentrarnos en él exige confianza, perseverancia y disciplina.Exige caminar, que no por gusto llamaban a los primeros cristianos "la gente del Camino".
Sobre esto estaremos compartiendo en próximas entradas.....
"El hombre se descubre y se construye a sí mismo en un acto de interiorización...".